El premio del MVP se quedó en casa. Shane Bieber se llevó el bat de cristal que lo acredita como el ganador del premio al Jugador más Valioso del partido. Bieber estuvo durante una entrada en la lomita y ponchó a los tres rivales que se enfrentó.

Bieber además del bat de cristal, también se llevó una camioneta de la marca Chevrolet. El lanzador de los Indios de Cleveland es el tercer pelotero en ganar este premio en su propio estadio. Anteriormente lo ganaron, Sandy Alomar con los Indios en 1997 y Pedro Martínez con los Medias Rojas en 1999.