Lo que parecía un día normal en una caja de bateo, se convirtió en una de las más grandes hazañas del beisbol. Un niño asistió a su practica de bateo sin saber lo que le iba a pasar. Todo pasó cuando el niño que practicaba, de no más de 12 años, realizó un swing y logró que la pelota rebotara y quedara nuevamente en el 'T-Ball' para la sorpresa de todos los que estaban presentes.

La cosa no quedó ahí, ya que todos lo medios de los Estados Unidos retomaron el video e incluso salió en el Top 10 de SportCenter.